RICARDO ORTÍZ
"El 29, los de la izquierda estábamos concientizando a las amas de casa en Ferreyra"
¿Cuál era su situación personal y política para 1969?Yo no era militante de ningún partido. Tenía participación pero desde el independentismo. Filosofía fue un caso extraño, alguien va a tener que escribir la verdadera historia. En los días previos al Cordobazo hicimos una asamblea en el teatrino, en donde me acuerdo que una estudiante de Letras que acababa de venir de Francia y era la secretaria de la Alianza Francesa, escribía las consignas del Mayo Francés en francés en las paredes del teatrino, una tilinguería total. En esa asamblea, dos días antes del Cordobazo, yo salgo elegido para la interfacultades por Filosofía, pero no por mi militancia, sino porque tenía teléfono y era más fácil contactarme. Yo estaba militando muy incipientemente en una organización que se llamó LAF: Línea Antiimperialista de Filosofía, y nuestro ideólogo era Waldo Ansaldi. Pero eran más bien grupos de estudio, no de acción; estudiábamos marxismo. Fui a varias reuniones de la interfacultades. Para el día del Cordobazo, yo vivía en un hotel en Gral. Paz y Humberto Primo con mi hermano. Ese día, el abandono era a las 10 de la mañana y después la concentración. Y a las 5 de la tarde iba a haber una reunión de la intefalcultaes en ese hotel. A las 4 de la tarde el Ejército allanó el hotel y se lo llevó a mi hermano.
No a usted.
No. Y ahí viene la historia de Filosofía. Yo no estaba. Porque el día previo al Cordobazo, Filosofía decidió, con un análisis muy ‘sesudo’ en donde demostramos que éramos la ‘vanguardia’, lo siguiente: los obreros iban a dejar las fábricas a las 10 de la mañana para concentrarse en el centro, ¿y qué pasaba en los barrios? Iban a estar las amas de casa. Entonces, en una acción ‘heroica’, los estudiantes de Filosofía fuimos a concientizar amas de casa. Fuimos ese día a Ferreyra a hablar con las esposas. Hoy no se cuenta por vergüenza, éramos un montón. Y volvimos como a las 4, 5 de la tarde caminando porque no había nada, entramos por Humberto Primo y nos encontramos con una ciudad incendiada, todo destruido, caminábamos solos porque no había nadie, humo por todas partes y no sabíamos qué había pasado: ahí nos esteramos del Cordobazo.
Mientras tanto, ustedes tratando de convencer…Claro, y haciendo el Cordobazo junto a los obreros estaban los que para nosotros eran los reaccionarios reformistas: Franja Morada, el FEN que era peronista y los trostkistas. La izquierda más radicalizada estaba en Ferreyra concientizando amas de casa. Lo que fue la cantera del PCR y de Vanguardia Comunista estábamos en Ferreyra. Me acuerdo que ya en Córdoba yo iba con una fotógrafa y empezamos a recorrer las barricadas, y no entendíamos nada. Y ya después me integré, yo iba a donde había quilombo, pero no era parte de ningún grupo. En realidad, se armaban grupos que iban haciendo barricadas. Con un grupo fuimos por la calle Sol de Mayo y antes de llegar a Pueyrredón viene la cana y nos metimos todos en una casa que todavía existe, una casa muy vieja, muy humilde, entramos como 50, el dueño estaba durmiendo y no se despertó. Salimos cuando pasó la cana, subimos por Julio A. Roca y tomamos un supermercado. Yo iba donde enganchaba. Los que estaban organizados eran los que nosotros llamábamos reformistas: la Franja y el integralismo.
¿Sintió que, como parte de ese colectivo inorgánico, era el dueño de la ciudad?
No, yo iba con bastante cagazo. Cuando vas solo, vas con temor. Ahora muchos se hacen los muchachitos, pero uno puede andar en algo de esa magnitud sin miedo.
Y en relación a lo que menciona, ese día hubo finalmente una unión entre lo que era el reformismo y las otras tendencias.
No, no hubo unión. Fijate que a los de izquierda nos decían los locos y las locas del bosque, porque éramos de Filosofía y estábamos allá perdidos.
Pero al menos, el 29 el reformismo dejó de ser tal y se hizo revolucionario.
Sí, por lo menos se unieron a lo que la izquierda más sensata no hizo. Ojo, un sector de la izquierda. Pero parte del movimiento estudiantil no estuvo al principio. Estábamos en Ferreyra…
Y, ¿concientizaron a alguna ama de casa?Y, creo que sí, nos daban mate… (risas)
Más allá de este detalle, ¿el Cordobazo les significó el inicio de algo en términos políticos?
En el caso nuestro, sí. Para el Viborazo yo ya estaba militando activamente en Vanguardia Comunista A partir de aquello se empiezan a formar cuadros y el partido en donde yo estaba tuvo una incidencia muy grande en el Viborazo. Fue una cantera de cuadros: Carlos Zanini, Toto López, el secretario de DDHH de la Provincia Raúl Sánchez, los dueños de Electro Ingeniería. Muchísimos.
Y hoy, a 40 años y como docente de la Universidad de la cual era alumno, ¿ve reflejado algo suyo en sus alumnos?
Absolutamente nada. Una distancia no de 40 años, sino de 200. Desconocimiento, viven en un termo, no les interesa nada. Tuvo un éxito la Dictadura: fue haber creado una generación que se acalló por el miedo y que pareciera que genéticamente se trasladó a sus hijos. La Universidad era una cosa tan hermosa, creo que no se va a vivir jamás lo que se vivió en aquella época, jamás. Lo que era el Comedor Universitario: todos los días había asamblea, discusiones, debates. Don Miranda era el encargado del Comedor, le decías que no tenías guita, que no te había llegado el giro, y te hacía pasar. Había tipos que hablaban en la asamblea encapuchados para que no se los reconociera y después lo veías haciendo cola para comer.